El quite de firmas dispuesto por la Unión de Trabajadores de
Prensa de Buenos Aires por el incumplimiento de los dueños de los diarios
Clarín y La Nación con la paritaria celebrada el año pasado, se se vió
reflejado este jueves en los principales matutinos porteños. La decisión
adoptada por la rama gráfica de la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos
Aires se observó en Clarín, Página/12, La Prensa, Tiempo Argentino, El
Argentino, y Ambito Financiero, pero no en el diario La Nación cuyos artículos
aparecen firmados. El gremio convocó a los periodistas de todos los diarios
porteños a no firmar sus artículos, en repudio a las maniobras patronales para
evitar la paritaria 2013 y para rechazar
los incumplimientos de Clarín y La Nación sobre la paritaria del año anterior,
cuyo plazo ya venció.
Irene Haimovichi, delegada en el diario La Nación, explicó
que en el caso del periódico de la familia Mitre, la patronal "ha
trabajado el tema del miedo entre los empleados" enviando telegramas de
apercibimiento a los que participaban de las asambleas.
La Nación, dijo, se escuda en una supuesta reducción de
ganancias previstas para "hacerle pagar a los trabajadores" con la
quita de distintos beneficios conquistados a lo largo de años.
En ese sentido, destacó que los ingresos del diario
crecieron un 20 por ciento respecto de febrero de 2012, pero que esa ganancia
se ve por debajo de las expectativas y que por ello, ajustan sobre los
trabajadores.
"Algo que nos queda claro es que el amedrentamiento
viene previo a las paritarias", destacó Haimovichi quien además señaló la
intención por parte de la empresa de "embarrar la cancha" e
"imponer sus reglas" por encima de la ley.
El quite de firmas se refleja en artículos, fotos,
infografías e ilustraciones, pero "no afecta la cobertura
periodística", según se resaltó.
Según indicó el comunicado del gremio, en el caso de Clarín,
la empresa "invocó el recorte de avisos para anunciar un ajuste sin
precedentes y la apertura de retiros voluntarios, al tiempo que busca el
desarrollo de periodistas que escriban, saquen fotos y filmen, todo al precio
de uno".
El titular del Grupo 23, Sergio Szpolski envió otra
comunicación donde buscó despegarse de las críticas a la veda de avisos pero
remarcó el impacto en sus ingresos. Según los argumentos de Szpolski, la veda
le traerá problemas pero no se utilizarán esos argumentos en la paritaria.
El gremio pide a los trabajadores de prensa "no dar crédito
a las victimizaciones financieras de empresas que cierran balances positivos
extraordinarios y cuyos números hay que revisar ante esta nueva
paritaria".
"La veda de anuncios publicitarios de supermercados y
grandes cadenas en los diarios del área metropolitana obsequió un argumento
invaluable a las patronales periodísticas para mentirle a sus trabajadores y
argumentar que la ausencia de esos anuncios podría llevarlos a la crisis",
advirtió el gremio.
En el comunicado se mencionó también que esos grandes medios
fueron beneficiados por grandes favores estatales: desde la pesificación de sus
deudas en dólares hasta los millonarios aportes de pauta, pasando por los
beneficios impositivos y los pagos con avisos de los aportes patronales para
sus empleados. Recordó que la paritaria anterior venció el 31 de marzo y que el
Ministerio de Trabajo "sigue sin fijar nueva fecha de audiencia para
empezar una paritaria".
